Transformación digital en las cadenas productivas de Ecuador

29 de septiembre de 2022

En el marco del Proyecto de Transformación Digital de Cadenas Productivas en Ecuador, CAF -banco de desarrollo de América Latina- y el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, presentaron la Hoja de Ruta para la Transformación Digital de tres sectores productivos:  el textil y confección, el cuero y calzado y el logístico.

En el marco del Proyecto de Transformación Digital de Cadenas Productivas en Ecuador, CAF -banco de desarrollo de América Latina- y el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, presentaron la Hoja de Ruta para la Transformación Digital de tres sectores productivos:  el textil y confección, el cuero y calzado y el logístico.

El Proyecto, que permitirá la innovación digital de las empresas, tuvo como base un diagnóstico integral y sus resultados fueron socializados con los sectores público, privado y la academia en seis encuentros, dentro de los cuales se definieron métodos de cuantificación y financiamiento de las iniciativas.

Durante el evento de presentación, que contó con la presencia de los representantes del Gabinete Sectorial de Desarrollo Productivo y del Consejo Nacional de Emprendimiento e Innovación de Ecuador, el ministro de la Producción, Julio José Prado, comentó sobre la estrategia Ecuador Compite, la cual tiene una línea estratégica denominada Ecuador Innova, donde el proyecto de transformación digital de las cadenas productivas presenta una alta consistencia con el objetivo del ministerio de identificar sectores con ventajas comparativas y transformarlas en ventajas competitivas a través de la innovación, la colaboración, la creación de institucionalidad y la adopción de tecnología y digitalización que permitan que esas cadenas productivas puedan avanzar en su nivel de competitividad.

De su parte, Daniel Rivera, representante de CAF en Ecuador, destacó los esfuerzos de CAF por impulsar una región más productiva, más competitiva y más integrada; y la reciente aprobación de un proceso de capitalización de la Institución por $7000 millones hasta 2030, que permitirá que CAF se convierta en el banco verde de la región y en el banco de la reactivación económica y social. En este contexto resaltó la relevancia del Proyecto para el dinamismo de la inversión pública y privada, la generación de empleo, la inclusión social y la construcción de oportunidades para los ecuatorianos, y el ideal que este proyecto pueda replicarse a futuro en los 20 sectores que comprenden la Estrategia de Competitividad del país.

Asimismo, Mauricio Agudelo, coordinador de la Agenda Digital y del Observatorio CAF para el Ecosistema Digital, comentó sobre la estrategia de CAF de acompañar a sus países miembros en los procesos de transformación digital a través del análisis y trabajo en pilares como la economía digital, el gobierno digital, la digitalización para la agenda verde y las ciudades y territorios inteligentes.

El desarrollo del Proyecto estuvo organizado alrededor de cinco fases: i) selección de cadenas productivas a ser analizadas; ii) análisis de la experiencia internacional para las cadenas seleccionadas; iii) diagnóstico y análisis en el Ecuador de las cadenas productivas seleccionadas; iv) desarrollo de la hoja de ruta para la transformación digital de las cadenas productivas; y v) selección e implementación de iniciativas para cada una de las cadenas seleccionadas. Así lo explicó Raúl Katz, consultor del Proyecto, quien comentó que las cadenas de textil y confección, y cuero y calzado representan una importante palanca para aumentar las exportaciones y exhiben un alto grado de asociatividad industrial. Resaltó el caso de la cadena logística, por su alta contribución transversal en varios sectores.

La construcción de estas hojas de ruta comprendió el desarrollo de talleres de revisión con representantes de los sectores público, privado y la academia, con el objetivo revisar, refinar, y definir los correspondientes métodos de financiamiento de las iniciativas.

Como resultado de este ejercicio, se formaliza la hoja de ruta, incluyendo el estado de situación, objetivos, iniciativas, impactos esperados, riesgo en la implementación, y agentes de implementación. Asimismo, la hoja de ruta presenta recomendaciones de políticas públicas que se deriven de los planes de intervención, incluyendo una matriz de iniciativas, con la identificación de los mecanismos y productos de financiamiento de las acciones.